¿Cómo se llamó la historia?
Primer Acto: Hace tres años, ‘en su delante’ de Peña Nieto, López Obrador decía: vamos a cancelar la reforma educativa, no va a quedar ni una coma.
Segundo acto: Hace poco más de dos años, en el día del niño, el Senado mexicano le obsequió a “ANLO MI DIOS” su contrarreforma para que quedara bien con los profes, y nada, se siguieron quejando.
Tercer acto: Esta mañana, en Chiapas, ‘cabecita de algodón’ no pudo llegar a su mañanera, porque los profes detuvieron el avance de su ‘trocona’, mientras el presidente, afuera del cuartel de la 7a. región militar en Tuxtla Gutiérrez, berreaba: ¡los he atendido bien, no merezco que me traten así!
¿Cómo se llamó la historia? El que duerme con niños amanece mojado.
Posdata: Los ‘maistros’ chiapanecos gritaban a voz en cuello, como ‘campaneros blancos’: “AMLO decía, que todo cambiaría; ¡mentira, mentira, la misma porquería!”