El vivo que entierre al muerto
Dicen los bien enterados que, el Ejército y la Marina todo lo ven, todo lo oyen y todo lo anotan. Si es así, van tarde las fuerzas del orden al combate contra la criminalidad en Huajuapanteón. En lo que va del año 19 personas han sido ejecutadas, todas por disparos de arma de fuego. Si nos atenemos a lo dicho por el secretario de Seguridad, Iván García Álvarez, el lunes, 22 de mayo, en conferencia de medios, sobre que la mayoría de los atentados están relacionados con el narcomenudeo y la disputa de territorio, queda claro que la estrategia frente a esa pelea era: “el vivo que entierre al muerto”. Por fortuna ya llegaron los refuerzos. Confiemos en que aminore la violencia y los habitantes de esa demarcación puedan asistir sin “el Jesús en la boca” al concierto de Julión Álvarez citado para el 16 de julio.

El sapo y la carreta
No me lo tomen a mal, pero a Javier Lazcano Vargas, ex titular de SINFRA en el gobierno Muratista, le pasó lo del sapo y la carreta. Cuenta la fábula que el anfibio, posado a la vera del camino, exclamaba: esa carreta que viene ahí me va a machucar, pero no se movía; esa carreta que viene ahí me va a machucar, pero no se apartaba del sendero; y esa carreta que viene ahí… ¡crag! Que lo despedorra. Ahora, le sobran motivos para esconderse. No es para menos, cuatro de sus ex colaboradores enfrentan ya a la justicia por el mamotreto de Símbolos Patrios, esa obra que no tenía ni pies ni cabeza, menos aún explicación lógica. Nunca escuchó la crítica, jamás aceptó su error; ya ni se diga la condena social sobre los malos manejos del dinero público. Ahora pagará caro su atrevimiento por no anticipar el desenlace de este bochornoso asunto.

¡No soy corcholata!
Qué penoso debe ser para cualquiera que aspiré a la presidencia de un país tan grande y glorioso como México que tenga que aceptar que le digan corcholata, ¿será que el poder y el dinero que lo acompaña valga la pena por semejante humillación? Por lo visto eso no le ofende a Claudia, Marcelo, Adán Augusto, Ricardo y Manuel que han aceptado sin chistar el mote presidencial, menos uno, el “Changoleón” legislativo, Gerardo Fernández Noroña, quien el domingo atajó esa expresión denigrante afirmando ser “hombre libre” que aspira a ser “candidato del movimiento a la presidencia”.
@latinus_us «Yo no soy ‘corcholata’, yo soy hombre libre que aspiro a ser candidato de movimiento»: Fernández Noroña. #Latinus #InformaciónParaTi ♬ original sound – Latinus